Los fenómenos naturales severos ocurridos en el mundo en los últimos 20 años, han afectado a millones de personas, provocando muertes y ocasionando cuantiosas pérdidas, que han afectado el normal desenvolvimiento de naciones o regiones en dependencia de su organización social. En América Latina y el Caribe numerosos países han resultado gravemente afectados por la acción de diversos fenómenos naturales. Terremotos, inundaciones, deslizamientos, huracanes, entre otros, han causado serios daños. Los establecimientos de salud no escapan a la tragedia, pudiendo quedar interrumpidos sus servicios, cuya función resulta imprescindible en estas situaciones críticas.
Cuba ha demostrado mucha responsabilidad y capacidad de actuación, en las fases de preparación, respuesta y recuperación, ante desastres de origen natural, tecnológico y sanitario. Es preocupación de los directivos y personal de salud para la toma de decisiones, “La preparación de los sistemas de salud en condiciones de emergencia y desastres”. Sería muy bueno poder contar con sus criterios sobre el tema, pues aún queda mucho por hacer.