Verdaderamente la Educación Abierta continua siendo un reto para la Universidad Médica Cubana. Actualmente esta estrategia, que se ha visto potencializada con la situación de la pandemia de la Covid - 19, nos ha obligado con el objetivo de mantener la continuidad del proceso de educación médica a tener que emplear más a fondo los recursos que ella nos brinda.
Aún queda mucho por decir y hacer, pero considero que esto se debe comenzar desde la etapa de pregrado, incentivar a los estudiantes a participar e incluso ir insertando parte del contenido de las diferentes asignaturas sobre esta plataforma. En la jornadas científicas estudiantiles se deben crear espacios participativos y cursos virtuales, cuyo objetivo fundamental seria profundizar en el conocimiento e incentivar el debate. Debemos proponernos obtener un egresado de nuestras universidades cada día más preparado y esta puede ser una de las estrategias a utilizar.
En la etapa de posgrado, sigue cumpliendo un rol esencial en el aprendizaje. Deben programarse cursos para los residentes de diversos temas que fortalezcan su conocimiento. Para los profesores y especialistas de más tiempo, la educación abierta y valga la redundancia nos abre la puerta para la formación continuada. Soy del criterio que se deben incluir un mayor número de cursos virtuales sobre diferentes temas de interés médico cuyo objetivo primordial seria fortalecer el aprendizaje y la actualización.
Por otro lado considero que los eventos científicos nacionales, e incluso a nivel hospitalario deberían crear un espacio virtual participativo, que enriquecería el nivel de estos eventos. Creándose un repositorio con todo lo expuesto, que pudiera emplearse como material de apoyo y consulta. Incluso pudiera agregar que nuestras publicaciones médicas seriadas, también se pudieran sumar a este noble esfuerzo por aprender más.